Descripción:

Equipo especializado en la prevención, diagnóstico, seguimiento y tratamiento de patologías tanto benignas como premalignas que implican la vulva, vagina y cuello uterino.

Desarrollo:

El objetivo de la Unidad de Patología del tracto genital inferior y colposcopia es la prevención, diagnóstico, seguimiento y tratamiento de patologías tanto benignas como premalignas que implican la vulva, vagina y cérvix.

En nuestra consulta te recibiremos si necesitas completar la revisión ginecológica rutinaria si así lo sugiere el resultado de la citología, la exploración o tus síntomas. Tu ginecólogo habitual te explicará de forma resumida el motivo de la derivación a esta Unidad y, una vez en ella, recibirás una amplia explicación de todo el proceso diagnóstico y la posibilidad de prevención futura a nuevos problemas; nunca debemos quedarnos con dudas sobre estos procesos, te podemos asegurar que aclararemos todas las inquietudes con información científica y contrastada.

El motivo habitual por el que sois derivadas a esta consulta es una alteración en la citología. Para completar el diagnóstico estas lesiones te realizaremos una colposcopia, esta es una prueba de imagen que se realiza en consulta, de unos 5 minutos de duración, no dolorosa, que consiste en visualizar tu cuello de útero y vagina con una lupa de aumentos y teñirlos con unas tinciones que detectan las zonas dañadas. Una vez localizadas estas zonas te realizaremos una biopsia dirigida, esto podría generarte una molestia leve, aunque en muchas ocasiones no genera molestia alguna. El análisis de la biopsia nos dará el diagnóstico definitivo sobre el tipo de lesión que tenemos y esto, a su vez, decidirá nuestra conducta.

Por otro lado, nuestra unidad también se centra en el diagnóstico y tratamiento de patologías premalignas vulvares como las neoplasias intraepiteliales vulvares (VIN) relacionadas o no con el VPH y la enfermedad de Paget vulvar. Así mismo te trataremos los problemas benignos del tracto genital inferior como las infecciones vaginales recurrentes, la vulvodinia o dolor vulvar, los condilomas genitales y otras tantas patologías que muchas veces no responden a tratamientos habituales o que se escapan del conocimiento y manejo de tu ginecólogo habitual.

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